lunes, 25 de abril de 2011

¿Quién se ha llevado mi queso?

A veces una vida entera no es suficiente, a veces cuatro meses pueden ser demasiados…


A veces permanecemos ciegos ante lo que realmente importa o lo que en realidad queremos, a veces ha estado delante de nuestros ojos durante mucho tiempo y no hemos sido capaces de verlo.

A veces un buen descubrimiento a tiempo puede no ser un gran acierto.

A veces el miedo no nos deja ver que hay opciones mucho más allá, detrás del propio miedo, nos cuesta entender que simplemente alguien movió de sitio nuestro queso…

A veces tenemos que ser valientes aunque nunca nos hayan enseñado cómo hacerlo…

“Al fin y al cabo, somos lo que hacemos para cambiar lo que somos”

Y en el transcurso de lo que hago, de la búsqueda del cambio, no estoy segura de gustarme demasiado.